Ana Usabiaga: un camino plagado de obstáculos hacia Tokio 2020

Este análisis podría resultar mucho más preciso si lo realizásemos a mediados de la próxima semana, cuando ya se conozca de forma definitiva la relación de naciones participantes en las dos últimas mangas de la Copa del Mundo, en Cambridge y Hong Kong, y en concreto en la prueba de ómnium. Pero no dudo que es ahora cuando conviene difundirlo para conocer de una forma más amplia la situación.

Porque si ya es complicado el sistema de clasificación olímpica para el ómnium, y más de por si para una ciclista como Ana Usabiaga que no está en las posiciones altas de la clasificación sino que tiene que luchar punto por punto, la decisión de la UCI de dejar entrar para cubrir ausencias a países que no habían logrado la clasificación para las Copas del Mundo o siquiera la condición de reservas, complica mucho más las posibilidades de que el ómnium femenino español esté en los Juegos de Tokio 2020.

Vamos a intentar explicarlo con la ayuda del cuadro adjunto. Como ya hemos explicado, el ómnium olímpico se clasifica por dos vías. En primer lugar, las ocho mejores naciones en el ranking de la madison tendrán presencia en esta prueba. España no tiene ninguna opción por esta vía. Son los países que figuran destacados en negrita en la segunda columna, con los siguientes clasificados en las posiciones inferiores. En este caso, algún intercambio entre ellos no tendría demasiados efectos en la práctica ya que básicamente todos ellos podrían entrar por el segundo criterio, en la tercera columna.

Se trata de las trece primeras naciones en el Ranking Olímpico de omnium para completar las veintiuna participantes en Tokio. Descartados ya los clasificados por el primer criterio –en rojo- aparecen en negrita los países que tendrían plaza a día de hoy, entre los que está España, en el puesto duodécimo (y penúltimo), pero con la amenaza cercana no sólo de Austria, también virtualmente clasificada (a 10 puntos y con una prueba menos), sino que hay hasta seis naciones a menos de cien puntos –un 19º puesto en una Copa del Mundo-. En la columna adjunta a la derecha vemos sus respectivas puntuaciones.

La columna penúltima (COMP) nos muestra el número de resultados válidos sumados, es decir, si ya han alcanzado ese máximo de tres en Copa del Mundo que se permiten –con esa salvedad de que para las naciones europeas al menos uno ha de ser en otro continente-, con ese asterisco que indica que les falta su Campeonato continental, una cita que, como ya habíamos indicado en las entregas referidas a la velocidad por equipos, otorga muchos más puntos. Tan sólo queda por disputar el Campeonato Astiático –del 14 al 19 de enero-, con 600, 540, 480, 450 y 420 puntos para las cinco primeras naciones, que lo más normal es que sean naciones como Japón –muy por encima de España en el ranking y que por tanto no nos afecta-, China, Hong Kong o Singapur. Países estos cuatro que, por esa desigualdad que hay entre los distintos continentales, podrían pasar a España una vez que se contabilicen dichos resultados de enero.

Usabiaga con el seleccionador, Raúl Mena.
Foto: Fed. Española

Pero hay algo más preocupante aún, que no estaba en las reglas del juego iniciales y es la participación en las Copas del Mundo. Todos los años la UCI determina en septiembre un ranking de plazas por país en cada disciplina, y que se calcula por resultados anteriores entre los que son importantes los logrados en pruebas C1. De esta forma, se establecieron los países que pueden intervenir en las Copas del Mundo, entre ellos España gracias a los puntos sumados en esas pruebas de categoría menor, y los cinco reservas, y que podemos ver en la última columna (CLAS) marcados con X y con R, respectivamente. En teoría, el resto de naciones no podrían sumar puntos en el circuito mundial… pero la UCI ha permitido –y seguirá haciéndolo- la presencia de otras naciones en el caso de que no se cubran las 24 plazas por titulares y reservas en Copas del Mundo. Polonia y Barbados ya estuvieron en Milton, sin estar entre las elegidas, y quien dice que estos dos países nuevamente, así como Colombia o Venezuela –también con una ristra de puntos solamente lograda en los Panamericanos-, puedan estar en las dos citas que quedan y superar en la clasificación a España.

¿Y qué opciones les quedan a nuestras corredoras, sea Ana o Irene Usabiaga u otra? Por ellas mismas, pocas opciones: la puntuación que ahora mismo suman sólo puede aumentar superando los resultados actuales: en primera instancia, el 18º lugar de Milton; luego el 15º de cualquiera de las citas europeas. Pero sinceramente no son muchos puntos: pasar del 18º al 15º son sólo 35 puntos, mientras que para las naciones que aún no tienen todos los resultados, un 24º y último puesto ya son 60 puntos, y un 20º, 90. Luego, sumar el máximo de puntos posibles en el Mundial –que también hay que clasificarlo ahora-, donde sí que no vale ningún fallo.

Y mientras tanto, dado que no hay ningún poder para cambiar ni la ilógica distribución de puntos en los Continentales ni la injusticia de dejar participar a países que no deberían poder hacerlo en Copas del Mundo, rezar por que el mal sea el menos.