Con cuatro corredores para la velocidad por equipos –con Roy Van den
Berg en la arrancada, Harrie Lavreysen en la segunda vuelta, y Jeffrey Hoogland
y Mathijs Buchli alternándose en el cierre- la selección neerlandesa ha sido la
gran dominadora en esta disciplina en todas las citas de los últimos años.
Cuatro velocistas de un gran nivel que, con esta fórmula, pueden luchar mejor contra el cansancio y mejorar la recuperación en
una prueba en la que este extremo es vital.
Sin embargo, el esquema no es válido, en principio, para los Juegos Olímpicos de Tokio,
donde el máximo de corredores para la velocidad es de tres, por lo que uno
de ellos debería quedarse fuera, lo que también tendría repercusiones para las pruebas individuales, en especial para el keirin
donde Buchli –en principio el que menos opciones tiene- es el vigente
campeón del mundo.
Y decimos en principio porque la reglamentación olímpica permite una pequeña ‘trampa’, perfectamente legal: poder alinear a un corredor que esté inscrito en otra de las
disciplinas olímpicas, es decir, carretera, BMX o BTT. De hecho, esta
posibilidad ya fue usada –sin reparos, a pesar de las críticas recibidas- por Francia y Alemania en Londres 2012, donde
los galos alinearon a Mickael Bourgain en la prueba en línea y los germanos a
Robert Forstermann en el mountain bike, donde se limitaron a dar unas pocas
pedaladas y reservarse para la pista. Lógicamente es sacrificar un corredor en
estas disciplinas, pero si hay menos opciones de medalla que en la pista…
Esta opción ha sido apuntada en este vídeo de Wielerflits, donde se ‘propone’
sacar a Jan Willem Van Schip de la
inscripción de la pista –debe ser el representante en el ómnium y en la
madison- y hacerlo en la carretera, donde sería un ciclista ‘de relleno’. No
por sus cualidades de ‘percherón’, sino por ser un recorrido demasiado quebrado
para él, aunque podría trabajar en esa primera parte del recorrido y tendría tiempo más que de sobra para
recuperarse para las competiciones de pista, una semana larga después. El
hueco quedaría libre para el cuarto velocista mientras que el fondista podría
participar en sus pruebas objetivo sin mayor problema.
Además, Países Bajos tendrá cinco corredores en línea y no es lo mismo que
el BTT o el BMX donde el número de representantes es de sólo dos, el tiempo de
recuperación menor y las opciones de que aporte algo, más bien inexistentes.
La segunda posibilidad es más ‘radical’:
que sea el propio Buchli el que se
alinee como quinto ciclista en línea, lo mismo que hizo Bourgain hace siete
años, aun a sabiendas de que en este caso su aportación será nula… aunque el
fin justifique los medios.
Fotos: UCI Track
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