“No es una locura. Es algo que tenía muy meditado, desde finales de verano”. Así nos cuenta el alicantino Alejandro Martínez que hoy anunciaba en Twitter su intención de irse a vivir a Cottbus (Alemania), junto con su entrenador, Bill Huck. “Eso sí, estoy muy ilusionado, como si fuese mi primera carrera de pista”
“Lo hablé con Bill y su mujer y
me dieron todo su apoyo. Estos últimos
años he aprendido más por golpes, por cómo me afectaban negativamente los
malos resultados, que por tener éxitos. Me
lo he pensado mucho hasta que lo decidí y la única duda que tenía era cuándo
irme”. Y en concreto, se irá desde
Palma de Mallorca, tras la disputa de la segunda manga de la Copa de España,
“porque desde allí hay mejor combinación de vuelos a Berlín que desde Alicante”.
El objetivo, poder “crecer como
deportista. Tampoco es algo a corto plazo. Mi
idea es estar allí viviendo los próximos cinco años, hasta París, aunque
alguna vez tenga que venir a España. Los
Juegos Olímpicos es la máxima aspiración de todos los deportistas y este año,
cuando vea las imágenes de Tokio, con los que son rivales todo el año, me va a
dar mucha rabia. Por lo tanto, vamos a hacer ese sacrificio, para intentar
estar en los próximos Juegos”.
A sus 21 años –cumplirá los 22 el
28 de mayo- considera que “más que una cuestión de disciplina, se trata de salir de la zona de confort,
centrarme exclusivamente en la bicicleta, aunque sean cuatro años de sacrificio.
Soy una persona a la que no le importa estar sólo, aunque lógicamente eche de
menos a los míos, que me han apoyado completamente desde siempre y por supuesto
en esta decisión. Además, es importante
para mí tener a mi entrenador cerca, sobre todo ese día que no te salen bien
las cosas, poder hablar personalmente”.
Por el contrario, reconoce que “no sé ni una palabra de alemán. Con
Bill y su mujer me entiendo en inglés, y aunque algo aprenderé, lo importante
es entrenar, correr y descansar y para ello me vale con el inglés”, mientras
que el frío es algo “con lo que tendré que convivir. Posiblemente Alicante sea el lugar de España en que más calor hace en
invierno e irme a un sitio como Cottbus… lógicamente notaré la diferencia”.
Y aunque el velódromo de esta localidad alemana es descubierto, “tenemos a una
hora los de Berlín o Frankfurt (Oder) por si no podemos entrenar”. Igualmente
confía “tener aprobado el carné de conducir antes de irme”.
Tanto Juan Peralta como Pepe
Moreno, sus compañeros en el equipo de velocidad, tienen a Huck como
entrenador, aunque cada uno tiene sus propios métodos. “Juan ya sabe cómo entrenar, trabajando sólo, y ya hemos visto que este
año le están saliendo muy bien las cosas a nivel individual, y la prueba es
que ha hecho su mejor marca a nivel del mar, 9.76. En cuanto a Pepe, también
está haciendo mejores marcas. En este caso, sí que podría ir alguna vez por Cottbus, pero es algo que ya
concretaremos”. Eso sí, con quien entrenará habitualmente es con Eric
Engler, uno de los mejores velocistas germanos.
“Creo que el trabajo con Bill se nos está notando a los tres. En mi
caso, en Dos Hermanas hice una buena marca, 10.54, pese a que no es un gran velódromo
y apenas había entrenado. Espero que en Mallorca pueda hacer una gran marca”.
Eso sí, no se pone ningún objetivo a corto plazo, “porque el Mundial tiene este
año otras connotaciones. Mi gran
objetivo es el Europeo sub23, en julio en Anadia (Portugal), porque es mi
último año en la categoría, y el año pasado en Gante no me salieron las cosas.
Luego veremos qué pasa después de los Juegos ya que con el cambio del
calendario de pista no tendremos Copas del Mundo y las fechas del Europeo
absoluto tampoco están claras”.
Fotos: COE /JJEE Minsk
Fotos: COE /JJEE Minsk
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