Aunque no se ha comunicado oficial u oficiosamente -ni siquiera a las Federaciones Autonómicas como participantes en el evento- las fechas del miércoles 23 al domingo 27 de septiembre son las que baraja la Federación Española para organizar en el velódromo Miguel Indurain de Tafalla (Navarra) los Campeonatos de España de pista, que no se pudieron celebrar del 8 al 12 de abril a causa del inicio de la pandemia del COVID-19.
El hecho de tener
que concentrar en apenas tres meses la temporada nacional de carretera deja muy
pocos huecos libres que puedan aprovechar otras disciplinas, como es el caso de la pista.
Sin embargo, ese último fin de semana de septiembre no tiene apenas pruebas
programadas, salvo la Santikutz Klasika de Legazpi, el domingo 27,
por la coincidencia con las fechas del Mundial de carretera. Por ello, se presentan como las fechas más propicias.
Sin embargo,
ha sido un detalle extradeportivo el que nos ha permitido ‘descubrir’ los planes federativos: la práctica imposibilidad de encontrar alojamientos hoteleros en
Tafalla, señal de que hay algún evento importante en esas fechas, y que no
puede ser otro que los propios Campeonatos de España, lo que ha originado este 'bloqueo'. Esperemos que no suponga
ningún problema para las Autonómicas encontrar un alojamiento en condiciones.
Y aunque desde
el punto de vista deportivo, siempre he pensado que no sería mala opción volver
a la anterior fórmula de repartir los Campeonatos, organizando en esas
fechas las competiciones de cadetes y juniors y atrasando hasta octubre o
incluso noviembre los de élites, la idea de la Española siempre ha sido
mantenerlos en un solo bloque, por razones exclusivamente organizativas.
Ahora
solamente queda por esperar que la pandemia no complique estas fechas y se
pueda celebrar el Campeonato de España, si bien están por determinar los
protocolos de seguridad que deberán seguirse, tanto de participantes como
de acompañantes, así como el programa de competiciones -ya que el inicio
del curso escolar supondría un obstáculo para que cadetes y juniors pudieran
competir en los días laborables de la semana, así como el absurdo sistema establecido
requerir un mínimo de cinco puntos en la Liga de Pista para poder
participar en los Nacionales, y que ahora se queda sin sentido tras no haberse
podido completar la celebración de estas pruebas.
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