La velocista belga, que en ningún momento habla de su salida
del equipo BEAT, con el que ha competido los últimos años, se marca como
primer objetivo el Europeo de pista en Minsk, del 23 al 27 de junio. "Si
empiezo allí con buenas piernas y buena cabeza, puedo prepararme para el
Mundial -en octubre- Pero aún queda un largo camino por recorrer".
Sobre su ausencia en Tokio, opina que "no llegué
a los Juegos debido a dos años terribles. El sistema de puntos no me lo puso
fácil. Tengo que acumular puntos para Bélgica en el keirin por mi cuenta,
mientras que los otros países casi todos tienen dos velocistas".
París es su nuevo reto. “Es el objetivo final y realmente
sé que puedo estar en París”, aunque, a sus 25 años, Degrendele, no descarta completamente
poder estar en Tokio este verano, ya que está como reserva. "Hay alguna
esperanza, pero no dejaré que sea demasiado grande, porque si no fuera me
decepcionaría de nuevo".
No hay comentarios:
Publicar un comentario