Villa tiene claro que las posiciones
en la cuarteta marcarán la selección, pero con ciclistas polivalentes que
puedan cambiar su orden y, claro está, intervenir en el ómnium y en la madison.
“Si hablamos de nombres, Francesco Lamon y Jonathan Milan podrán hacer
un buen comienzo. Milán, Liam Bertazzo y Simone Consonni podrán soportar
bien la segunda posición, que quizás sea la más complicada. Elia
Viviani, Davide Plebani y Michele Scartezzini, además de los ya mencionados
Milán, Bertazzo y Consonni, también pueden hacerlo bien en la tercera posición por
delante de Ganna, que se fijará en la cuarta posición. Además de estas
evaluaciones, tendré que tener en cuenta que Consonni y Viviani son
actualmente los más acreditados para correr la madison y también el omnium. Bueno,
es muy difícil elegir, pero digamos que, una vez elegido, creo que tengo un
buen equipo polivalente, gracias a su trabajo a lo largo de los años”.
Volviendo a la cuarteta el seleccionador ‘azzurro’
señala que “para llegar a la final tenemos que ser fuertes”, señalando el
peligro de los días húmedos y calurosos en agosto en Japón, mientras no se
siente preocupado porque Ganna corra la contrarreloj antes de la persecución. “Filippo
correrá la contrarreloj porque es campeón del mundo. Hubiera sido
mejor haber tenido la persecución primero, pero no podemos hacer el programa
como nos plazca; así que estamos trabajando alternando la contrarreloj
con días en la pista para que Filippo se acostumbre a este tipo de esfuerzos”.
Por último, Villa se refiere a su talón de Aquiles, la velocidad, donde “se necesita un cambio de mentalidad y de rumbo. Nuestra cultura ciclista nos lleva a colocar al ciclista en las grandes carreras como el Giro, el Tour, las clásicas ... Tenemos una tradición que no nos lleva a pensar en el velocista de las Olimpiadas en la pista. A veces pienso que es mejor buscar talento fuera de las carreras ciclistas juveniles o en otras disciplinas ciclistas, como el BMX”.
El seleccionador transalpino señala un
dato en el que pocos han reparado cuando se le pregunta si Balsamo-Paternoster
sería la pareja ideal. “La madison se corre antes del ómnium y quizás haya
ciclistas muy fuertes en el ómnium que no corran la madison por lo que supone
no de esfuerzo extra, sino de riesgo”, aunque considera a la dupla como “fantástica”.
Sobre la cuarteta considera que “somos
demasiados jóvenes para Tokio, pero será una experiencia fundamental para
nuestro enfoque a París”, a la vez que señala el “sueño” de contar con la
velocista Miriam Vece para dentro de cuatro años, aunque “lamentablemente si el
sistema de clasificación sigue siendo el actual, favorece a las naciones que
tienen velocidad por equipos, por lo que será difícil”.
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