Cinco vidas ciclistas que se encuentran en el Velódromo de Barcelona

Fotoreportaje, por Albert Fernández Monterrubio

Ricard Martín, Ester Rubio y Laura Rodríguez, entre otros,
en el podio del Velódromo de Horta

Ester Rubio, Laura Rodríguez, Michelle Nathalie Gil, Pol Hervás y Ricard Martín son cinco ciclistas que han tenido diferentes trayectorias en el ciclismo en pista, tal y como muestran las distintas de edades que tenían cuando se iniciaron, desde los 8 años hasta los 18, o la mayor o menor cantidad de victorias conseguidas y campeonatos logrados. No obstante, todos tienen como nexo en común que entrenan y compiten en el Velódromo de Horta Miquel Poblet. Para poder entender dónde se encuentran cada una de estas vidas en este momento de su carrera deportiva, es necesario conocer cómo se iniciaron en la modalidad, de qué manera compatibilizan la práctica deportiva con los estudios y el trabajo, saber qué oportunidades o dificultades han tenido para combinar la pista con la carretera, escuchar su opinión acerca de su presente y futuro en la disciplina y prestar atención a la sincera valoración que realizan del estado actual del ciclismo en pista en Cataluña y en España. 

De la hípica al ciclismo en pista 

La mayoría de ciclistas comienzan en el velódromo a una edad muy temprana, en categoría de escuelas o cadetes. Sin embargo, Ester Rubio (Genesis Cycling Team) siguió un camino distinto, puesto que no comenzó hasta hace tan solo 5 años. Su tardía incorporación al ciclismo en pista se debe a que anteriormente practicaba hípica, deporte en el que también era entrenadora. 

Esther Rubio, explicando sus sensaciones
tras una serie al técnico Bernat Moreno

Sin embargo, su interés por la bicicleta le viene de su padre, quien conocía al paraciclista Juanjo Méndez (fundador, junto a Bernat Moreno, de Genesis). Al principio, como la mayoría de corredores, comenzó a salir en bicicleta con su progenitor y muy rápidamente se introdujo en el ciclismo en pista. De la misma manera, casi desde el primer momento ya comenzó a competir. 

Estudios, trabajo y ciclismo, “in that order” 

En relación con la práctica deportiva de los jóvenes ciclistas, hay que tener presente que muchos de ellos estudian, trabajan o compaginan los dos con el ciclismo. Un claro ejemplo de corredora de este último tipo es Michelle Nathalie Gil (Catema.cat-Baix Ter), quien ha trabajado como azafata de vuelo en Vueling, lo que no le permitía tener unos horarios claros de entrenamientos. 

Además, en dos semanas finaliza la carrera universitaria de psicología y actualmente está realizando las prácticas en el área de psicología clínica del Hospital Sant Joan de Déu, por lo que suele entrenar al mediodía. 

Un claro ejemplo de cómo compaginar estudios,
trabajo y ciclismo, Michelle Nathalie Gil

Respecto al hecho de compaginar estudios y trabajo, confiesa que, en los periodos del año en los que tiene más carga de tareas, la bicicleta sale perjudicada porque afirma que son más horas las que debe invertir. 

Carretera vs Pista. ¿Por qué no las dos? 

Muchos de los ciclistas combinan el ciclismo en pista con la carretera, intentando llenar las fechas sin carreras de uno u otro calendario. Sin embargo, es conocido que algunos equipos desaconsejan a sus corredores practicar otras modalidades que no sean la ruta. Afortunadamente, a ninguno de los entrevistados les ha sucedido algo parecido, sino que han tenido la libertad de poder escoger. 

No obstante, como expone Pol Hervás (Team MPGroup), muy pocos son los equipos que priorizan el ciclismo en pista, sino que, como son escuadras básicamente de carretera, quieren que compitan en esta disciplina, ejemplificándolo con su estancia en el equipo filial del Caja Rural-Seguros RGA. Lejos de buscar la parte negativa, el ciclista opina que el propio corredor debería ser el primero en entender la situación, ya que cree que, si el objetivo de la estructura es la carretera, en el caso que coincidiesen carreras de diferentes modalidades, debería elegir la de ruta. 

Pol Hervás, en una madison
con su compañero de equipo Marc Ortiz

Sobre la combinación de la carretera y la pista, Hervás cree que aporta más experiencia con diferentes bicicletas, ya que ayuda a mejorar la cadencia y las habilidades como ciclista, lo que permite llevar este progreso al ciclismo en ruta. 

Ganar campeonatos sin “tener ayuda” 

Entre los pistards entrevistados, actualmente la que parece que puede llegar a tener un mejor futuro en la modalidad es Laura Rodríguez (Genesis Cycling Team), no solo por haberse proclamado en 2020 campeona de España Sub23 en las pruebas de keirin y scratch (y de puntuación en 2019), sino porque además fue convocada por la selección española para los Campeonatos de Europa Sub23 y Élite. 

En cuanto a una presencia más continua en la selección española, manifiesta que ser convocada es “una silla caliente”, ya que el seleccionador tiene presente a un grupo de ciclistas que convoca a una serie concentraciones para determinar quiénes son las que están en mejor forma y decide las integrantes de la selección para las próximas carreras. 

Laura Rodríguez, cada vez más cerca de la élite

El objetivo para el que está trabajando es lograr una plaza en la cuarteta de la persecución por equipos de la selección española. Además, para esta temporada, anhela ser convocada para el Europeo Sub23 y seleccionada para el Mundial de ciclismo en pista, cita para la cual espera llegar en buena forma al mes de octubre. A largo plazo, su meta es poder disputar Mundiales regularmente y poder sentirse una más en el pelotón femenino de pista. 

Respecto a la posibilidad de llegar a vivir económicamente tan solo del ciclismo en pista, Rodríguez explica que es muy difícil porque, al menos en España, los equipos no suelen pagar por correr, por lo que reciben becas de federaciones e instituciones. Sin embargo, estas ayudas suelen contemplar un importe muy bajo y se deben cumplir unos requisitos bastante restrictivos para conseguirlas. Finalmente, concluye que, en España, la única manera de poder ganarse la vida con el ciclismo en pista es hacer podios en mundiales, lo que tacha de dificultoso porque hasta lograrlo no tienen ninguna ayuda. 

Un mal presagio a corto plazo para un futuro dorado

En cuanto a la situación en la que se encuentra en la actualidad el ciclismo en pista en Cataluña y en España, se suele observar una visión pesimista entre los expertos. Una voz cualificada para explicar qué está sucediendo es Ricard Martín (Proton Cycling Academy), quien, a pesar de su juventud, lleva 13 años ligado a esta modalidad. 

Joven, pero con mucha experiencia, Ricard Martín 
tirando de sus compañeros del Proton Cycling Academy

En primer lugar, afirma que de los Pirineos hacia abajo está “mal visto” que un ciclista compita en el velódromo, ya que se considera que es un corredor menos en la carretera, visión que cree que se debería cambiar. 

Además, explica que no se celebran suficientes carreras, sobre todo en Cataluña, y critica que se haya disputado una Liga de Pista nacional de Cadetes y Júniors, pero no una Copa de España de Élites-Sub23. Además, pide que, si se fomenta la cantera, se haga de forma correcta y no acumulando las citas en unas pocas semanas, seguidas de meses sin competiciones. 

Asimismo, cree que se debe hacer un planteamiento respecto al calendario con el objetivo de estructurar mejor las carreras. Sobre cómo se tendrían que planificar las competiciones, Martín explica de qué manera se está haciendo en otros países, cuyos calendarios cuentan con una única carrera cada fin de semana, lo que permite que haya más espacio entre pruebas y que los ciclistas tengan más ritmo y más ganas de competir. Para poder llevar a cabo esta remodelación, indica que deben impulsarla los organizadores y las federaciones. 

Por otra parte, opina que hay velódromos que están en mal estado, ya sea porque están “un poco abandonado”, tienen errores de construcción o su pista presenta grietas y baches. Por este motivo, cree que se deberían hacer estructuras viables y que puedan llegar a ser rentables, lo que evitaría el estado actual de declive de los velódromos. 

Hervás y Martín, en plena pugna en el velódromo de Horta

Finalmente, el corredor concluye que el ciclismo en pista en Cataluña y en España “dará un bajón”, que llevará prácticamente al abandono de la modalidad. Sin embargo, cree que resurgirá unos años después y se volverá a tener una época dorada. 

¿Cómo se puede impulsar el ciclismo en pista?

Una de las preguntas realizadas a los protagonistas durante las entrevistas trataba sobre qué cambios se tendrían que incorporar para mejorar el ciclismo en pista en Cataluña y en España. Este listado incluye las diferentes propuestas que comentaron: 

• Los directores de las escuelas y de los equipos de ciclismo de base deberían fomentar que sus ciclistas practiquen ciclismo en pista, para que aprendan que se pueden compatibilizar diversas modalidades.
• Organización de más carreras de ámbito estatal y tener una Copa de España de 3 o 4 carreras para intentar agrupar la mayor cantidad de ciclistas posible.
• Evitar la coincidencia de carreras para no tener que elegir entre carretera y pista, mediante una mayor organización entre federaciones.

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  La bisoñez de Rubio con la experiencia de Rodríguez

  Becas que sean asequibles para los ciclistas con buenos resultados, sin límite de edad, que les permitan sufragar los gastos y poder obtener unos ingresos de su práctica deportiva, no solo procedentes de las federaciones, sino también de las comunidades autónomas o de las secretarias de deportes.
• En el caso de Cataluña, piden que no innoven con pruebas o distancias nuevas y que se enfoquen en el tipo de competiciones que los corredores se pueden encontrar a nivel nacional o internacional.
• Organizar carreras que presenten más pruebas de velocidad, ya que, actualmente, el calendario catalán está enfocado a los fondistas. Este hecho no permite que los velocistas compitan e impide que los ciclistas que están aprendiendo participen en la mayor diversidad de pruebas posible.
• Planificación de entrenamientos por parte de la Federación Catalana para que los ciclistas puedan entrenar de forma conjunta y bajo la supervisión de los técnicos de la entidad. Especialmente destinados a corredores cuyos equipos no suelen competir ni entrenar en la pista.
• Facilidades para adaptar el horario de entrenamiento en el Velódromo de Horta a las necesidades de los ciclistas de competición.