Los Europeos, a octubre, ¡la semana antes del Mundial de Ashgabat!

Cuando este mediodía he recibido un mail de la UEC referido al Campeonato de Europa, lo primero que he pensado -ingenuo que es uno- es que se estaba anunciando la nueva sede del recién suspendido Continental de Minsk y en las fechas previstas de inicio de verano. Craso error.

Tras leerlo, he pasado de la decepción de ver que el Europeo no mantiene las fechas, a la incredulidad más absoluta al apercibirme de que se ha ubicado en octubre -comenzando el martes 5 o el miércoles 6 y finalizando el sábado 9 o el domingo 10-, ¡justo la semana anterior del Mundial de Ashgabat! No sé por tanto si el tuit que escribía el seleccionador francés Steven Henry –“se prevé un chárter para ir a los Mundiales”- es una ironía o la triste realidad que espera a los competidores que deseen acudir a estos dos grandes eventos -los más importantes del año salvo para aquellos que compitan en los Juegos-, ya que pasar por casa o tener unos días de descanso es una utopía. Vamos, como enganchar Giro y Tour, que me comentaban esta mañana.

Eso sí, todo con una justificación creíble, aunque no en la línea necesaria: “Dado que la crisis sanitaria de la COVID 19 sigue su curso, especialmente en lo que se refiere a los procedimientos relacionados con los viajes entre los distintos países, el aplazamiento de los Campeonatos a octubre permitirá a los equipos nacionales gestionar de la mejor manera posible las situaciones logísticas del traslado y dejará el tiempo necesario para que el nuevo organizador se ocupe de todos los aspectos de la organización del evento”.

Antes de nada, recordar que el Europeo de 2021 estaba programado en febrero, pero que se decidió, con muy buen criterio, atrasar hasta junio para que sirviera como un último test para los Juegos Olímpicos. Lógicamente no será así, y en esta temporada a la que a la pista le están creciendo los enanos -y con bastante menos justificación que en 2020-, esa última prueba no existirá, aunque afortunadamente San Petesburgo ha salido al quite organizando una Copa de las Naciones en julio que para algunos será como agua de mayo, aunque para otros llegará demasiado tarde, y se presentarán en Tokio sin haber competido en el último año. Luego nos extrañamos que se organicen ‘competiciones piratas’ para suplir a las oficiales.

Y si es malo no tener un Europeo en junio, casi peor es tenerlo en octubre, no solo por ese solapamiento con el Mundial, sino por el hecho de que se cae todo el sistema de selección establecido en la Normativa UCI, que prevé determinar las plazas olímpicas seis semanas antes, es decir, a final de agosto. Tanto este Europeo como si se reprograma la Copa de las Naciones de Cali en septiembre no tendrían validez… y muchas selecciones no podrían estar en el Mundial, reglamento en mano. El temor de una ‘tabla rasa’ ya ha empezado a tomar forma… perjudicando a los pocos que hasta el momento han cumplido asistiendo a Hong Kong.