La ciclista
mexicana Yareli Salazar ha presentado
una demanda, junto a su compañera de selección Jessica Salazar, contra la Federación Mexicana de Ciclismo,
como consecuencia de la serie de errores que propiciaron que las dos mejores pistards del país norteamericano se
quedaran sin competir en Tokio 2020.
“Lo que pasó ya no se puede revertir, pero
debe ser un cambio para el futuro, tanto para mí como para las generaciones
futuras, indicó la fondista mexicana.
Esta acción coincide con la suspensión por parte de la
UCI de la Federación Mexicana por diversas irregularidades, sobre todo en
los mecanismos electorales, por lo que se han convocado una Asamblea para el próximo 15 de octubre, con las dos
Salazar y otras ciclistas participando activamente para elegir a un nuevo
máximo mandatario. “La Federación ha estado funcionando así durante muchos
años, por lo que damos gracias a la UCI por haber tomado medidas al respecto”.
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