Tras ganar el oro para Australia en la velocidad por equipos el primer día, junto a Leigh Hoffman y Thomas Cornish, dando una grata impresión, Mathew Richardson fue la grata revelación de la Copa de las Naciones en Glasgow, al llevarse el bronce en el keirin dos días después y rematar con la plata en la velocidad.
Podio de la velocidad. Foto: SWPix / AusCycling |
Sin duda, hay que destacar su actuación en la velocidad,
donde, tras ser sexto en los 200 metros, eliminó en cuartos al británico Jack
Carlin, vigente medallista de bronce, para pasar directamente a final por
la caída sufrida en semifinales y que puso fuera de carrera al trinitense Nicholas
Paul. “Tener la oportunidad de competir con el campeón mundial en Lavreysen en
esa final fue increíble. Y salir con plata fue más de lo que podría haber
pedido”.
La próxima semana tendrá la oportunidad de agregar más medallas a su bolsa en la segunda manga de la Copa de Naciones en Milton, Canadá, antes de que lleguen estos grandes objetivos del año: Juegos de la Commonwealth a finales de julio y Campeonatos del Mundo, a mediados de octubre.
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