El pasado 1 de abril se publicó el calendario de competiciones de París 2024, y se aprobaron los criterios de clasificación de todos los deportes olímpicos, indicándose que serían publicados en los días sucesivos.
Lo más grave es que se han dejado pasar dos ocasiones
como las Copas de las Naciones de Glasgow y Milton para dar algunas
indicaciones más precisas, salvo indicar de forma oficiosa que el sistema
sería muy similar al de Tokio 2020 y que comenzaría en el Mundial de Saint
Quentin-en-Yvelines, este mes de octubre.
La gran duda es que en el ciclo pasado había seis Copas
del Mundo, en las que se elegían los tres mejores resultados -con al menos
uno fuera de tus continentes-, y ahora son sólo tres las pruebas de la Copa
de las Naciones.
Por otro lado, Baanwatch publicaba ayer que podría pasar un mes y medio o dos antes de que el sistema esté listo, e incluso avanza
que el Mundial de este año podía no contar. Claro que para ello -y mantener dos
citas puntuables-, el de 2024, en Ballerup (Dinamarca), debería adelantarse
de sus fechas de octubre. Ya fijadas por la UCI, hasta antes de los Juegos,
algo que ya se hizo en el pasado, cuando el Mundial también se disputaba en
otoño.
Y es que, a falta de información, la rumorología cubre
este vacío, lo cual no es bueno para nadie.
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