Segura, un quinto lugar del omnium que sabe a poco por su ambición

La quinta posición de José Segura en el ómnium junior ha sido la mejor lograda por la selección española en la cuarta jornada del Campeonato de Europa junior y sub23 que se celebra hasta el martes en Anadia. Más que el puesto, hay que destacar la valiente actuación del valenciano que hasta el final apostó por ganar. Elmar Abma (Países Bajos), con 116 puntos, Noah Hobbs (Gran Bretaña), con 107, y Daniil Yakovlev (Ucrania), con 102, eran los medallistas, con Segura terminando con 97 puntos.

Segura, en su ataque 'a por todas' en la puntuación. Foto: JPA

El valenciano daba muestra de sus ambiciones en el scratch, ya que un movimiento suyo, a falta de quince vueltas, era el que provocaba la selección. Primero con cinco corredores, a los que se les sumarían hasta ocho más, serían trece los que entrarían destacados, con victoria de Abma y con el español muy bien situado, en cuarta posición.

En la carrera tempo, el valenciano sumaba dos sprints -noveno y décimo- que le servirían para luchar por la cuarta plaza en la llegada, aunque una mala colocación sólo le permitirá ser inicialmente sexto. Y es que la clasificación se corregiría dando sólo uno de los puntos por bueno, por lo que bajaba a la décima plaza.

El campeón del mundo, el checo Radovan Stec, se llevaba la victoria gracias a una larga escapada que le reportaría ocho puntos, con Abma tercero, lo que le servía para consolidar el liderato, con 76 puntos, por 72 del portugués Joao Martíns, 66 de Yakolev y 62 de Hobbs y 56 del español. La mala noticia, una caída del italiano Dario Igor Belleta, uno de los favoritos, que le impediría terminar el ómnium.

La eliminación no comenzó mal para Segura, con una rapidísima salida de Martins, el segundo en caer tras una decisión arbitral muy rigurosa, y también de Yakovlev, duodécimo, dos de los rivales directos. Segura hizo una carrera muy sólida, terminando tercero de forma muy apurada, y desgraciadamente no pudo aprovecharlo mucho: Abma, que en la parte final estaba seriamente ‘tocado’ fue cuarto, por lo que sólo les separaban dos puntos, y Hobbes se llevaba la victoria.

Podio del omnium femenino. Twitter François Lammiraud

Es decir, a falta de la puntuación, 110 puntos para el neerlandés, 102 para el británico, 92 para el español y 90 para el alemán Tobias Muller, que se metía en la pelea tras el segundo lugar en la eliminación. Es decir, plaza provisional en el podio, pero con opciones incluso de mejorar.

Tanto Abma como Hobbs controlaron bien sus posiciones y mantendrían al final sus medallas. Pero ello no quiere decir que Segura no lo intentase con toda su artillería, a falta de 35 vueltas: en ese momento había perdido la plaza provisional del podio, pero su apuesta era el máximo, no el bronce. El valenciano se iba por delante, junto al Zak Erzen, ganando un sprint… pero provocando el pánico en el pelotón que no le perdonaría.

De ahí hasta el final, una vuelta ganada de Martins le hacía ser tercero provisional… aunque el último sprint ganado por Yakovlev le daría el bronce. Para Segura, las circunstancias del final de carrera le harían descender hasta el quinto lugar -y no al séptimo como aparecía en una primera clasificación-, que a todos nos supo a poco por su valentía. Y es que el desempate se había realizado de forma errónea.

La prueba femenina no conoció otra dominadora que la italiana Federica Venturelli, que lograba su tercer oro en este Europeo tras los de la persecución individual y por equipos. Tras ganar el scratch escapando cuando quiso, era segunda en una carrera tempo marcada por una larga escapada de la polaca Maja Tracka, espoleada por una relegación en la prueba anterior, y volvía a ser la mejor en la eliminación.

La puntuación fue la culminación del éxito de la transalpina, que incluso se permitió el lujo de ganar una vuelta para llegar a 147 puntos, aunque estaban en juego las medallas entre la británica Grace Lister, la neerlandesa Babette Van der Wolf y la alemana Justina Czapla, en una horquilla de dos puntos. No obstante, la plata fue para la francesa Dorianne Kaufmann, gracias a una vuelta ganada (113), mientras que Lister era la más hábil en el último sprint para llevarse el bronce (107).

Podio de la puntuación femenina. Foto: FCI

En cuanto a Ainhoa Moreno, bastante regular, pero desgraciadamente lejos de las primeras posiciones en todas las pruebas: décima en scratch, novena en la tempo y décima en la eliminación. Eso sí, su habilidad para entrar en el último sprint de la puntuación, le permitió subir de la undécima plaza a la décima final.

Dos puntuaciones muy diferentes

Para los sub23, fue el turno de la puntuación en la sesión vespertina. La prueba femenina fue un coto cerrado de la italiana Silvia Zanardi y de la neerlandesa Daniel Hengeveld, que ganaron una vuelta juntas a mitad de carrera y otra casi al final, también solas ellas dos, que casi ni necesitaban. Y la rapidez de la italiana en los sprints intermedios le dio el oro, 63 a 57.

Otras cinco ciclistas también ganaron vuelta entre las dos tentativas de las grandes protagonistas. Y aunque nunca las amenazaron, sí que llegaron muy igualadas al último sprint, con la francesa Kristina Nenadovic, la británica Madaleine Leech y la irlandesa Lara Gillespie con 28 puntos: la gala fue la más rápida en el último sprint y con ello llegaba a los 38 puntos que le daban el bronce. Curiosamente Nenadovic estuvo a punto de ganar vuelta en la primera tentativa de Zanardi y Hengeveld, pero no pudo culminar un ataque que le habría valido el bronce mucho antes.

Pallarés, muy activo en la puntuación. Foto: UVP-FP

Maria Banlles fue la inesperada representante hispana, que participó en algunos conatos al principio, con escasa importancia, y que fue una de las nueve ciclistas que se fueron al suelo cuando se llevaban 28 de las 100 vueltas, lo que obligó a detener la carrera. Pudo reincorporarse, pero desde ese momento no se la vio, por lo que suponemos que tendría algún problema físico, ya que terminaría perdiendo una vuelta y acabaría en el puesto 15.

Más complicada de contar resulta la prueba masculina, a tenor de la gran cantidad de vueltas ganadas y perdidas, y sobre todo por la revisión que hicieron los comisarios al terminar y que cambiaría totalmente el podio. Por lo vivido ‘en directo’, el italiano Manlio Moro conseguía un merecido triunfo por ser el más efectivo en los sprints de la segunda parte de la carrera.

Pero una segunda vuelta dada a corredores como el austriaco Maximilian Schmidbauer, el portugués Diogo Narciso y el francés Gregory Pouvreault -y que no podemos avalar desde la distancia solo en base a las imágenes del streaming- les permitiría acceder al podio, con 64, 63 y 53 puntos.

Ekain Jiménez, en sus octavos de velocidad. Foto: UVP-FP

Y aunque el desenlace es otro, no cambia un ápice el final de la prueba, con Narciso y Marcel Pallarés lanzando un potente ataque a falta de quince vueltas, para ganar el bonus o al menos los dos últimos sprints. El catalán no quiso componendas y se llevaba los quince puntos en juego, aunque si hubiera ganado el luso el último sprint habría sido segundo tras Moro según la primera clasificación… o ganador según la definitiva.

Hasta ese momento Pallarés había mostrado muy buenos detalles, ganando uno de los primeros sprints, e incluso una bonificación por vuelta, que luego perdería en una situación en que le pilló a traspié. Con los dos últimos sprints ganados terminaba con 21 puntos, en un décimo puesto que nos supo a poco, vistos sus detalles, aunque es cierto que le faltó regularidad.

Dos títulos más para los velocistas alemanes

Terminando el análisis del día con los velocistas, los sub23 comenzaron el torneo de velocidad, en el que Ekain Jiménez se estrenaba con el duodécimo tiempo en la serie de 200 (10.326), en la que dominaba el neerlandés Tijmen Van Loon (9.840), con otros dos corredores por debajo de los 10 segundos. Sin embargo, el español no lograba superar su serie de octavos, ante el británico Hayden Norris, con lo que terminaba su participación.

Podio de la velocidad sub23. Foto. BDR

Tras la disputa de los cuartos, en los que solo Van Loon no necesitó desempate, quedaban las siguientes semifinales para mañana: Van Loon-Oscar Caron, que eliminaba en el desempate a Norris, y la de los alemanes Anton Hohne-Willy Leonhard Weinrich, que se pese a su undécimo tiempo en los 200 hacía un gran concurso, superando en los enfrentamientos directos a sus rivales Lars Romijn y Luca Priore (9.990 en los 200).

Por su parte, las dos categorías que se iniciaron ayer, la junior masculina y la sub23 femenina, finalizaron con relativas sorpresas. La final juvenil tuvo como protagonistas a los autores de los dos mejores tiempos, Marcin Marciniak y Mattia Predomo, si bien el primero necesitó del desempate para clasificarse. Quizá por ello llegó más cansado a una final que se llevaba, en dos mangas, el transalpino, lo mismo que en la lucha por el bronce el alemán Danny Luca Werner no necesitaba desempate ante Matej Hytych.

Por su parte, la final sub23 que se presumía monocolor francesa por los dos mejores tiempos en 200, tuvo como ganadora a la alemana Alessa-Catriona Propster, que en la final derrotaba en dos mangas a Julie Michaux, después de haber eliminado en semifinales, esta vez sí, con necesidad de ‘belle’, a Taky Marie Divine Koaumé que luego se tomaba el desquite en la consolación sobre la ucraniana Oleksandra Lohviniuk.

Por último, la final directa de los 500 metros juniors, sin españolas, y en la que Clara Schneider se llevaba su tercer oro de este Europeo, tras haber ganado velocidad individual y por equipos. Con 34.918 era la única que bajaba de los 35 segundos, por delante de la belga Julie Nicolaes (35.177) y de la otra alemana, Lara-Sophie Jager, con casi un segundo más (36.127).

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