Ganando tanto la eliminación como la madison en el último día, Matthijs Büchli y Lorena Wiebes, que ya se habían anotado el scratch, terminan el Campeonato de los Países Bajos como tricampeones, lo mismo que Marit Raaijmakers, compañera de la ciclista rutera en la americana, que había ganado previamente la puntuación y la persecución.
Wiebes y Raaijmakers, celebrando su triunfo. Foto: Gert Bonestroo/NK Baanwielrennen |
Wiebes comenzaba su día dorado con el oro en la
eliminación, donde dejó atrás a Nina Kessler y a Marjolein van 't Geloof. “No
tengo experiencia en esta prueba, pero sí mi sprint como arma. El comienzo fue
un poco agitado e incluso francamente peligroso. Quiero ganar, pero no
quiero lesionarme. Pero luego se hizo más claro y terminé sin problemas”,
dijo la campeona.
Posteriormente, junto a Raaijmakers, se imponía en la
madison, alcanzando el triplete. Y lo hicieron con holgura, al alcanzar 37,
por los 20 de Juliet Eickhof y Mylene de Zoete y los 19 de Kessler y van 't Geloof,
que se jugaron las posiciones del podio en el último sprint. ”Lorena y yo corrimos
aquí el año pasado sin entrenamiento conjunto y quedamos terceras. Ahora con
dos entrenamientos ya hemos sido oro. Con mi experiencia y su sprint,
juntas, formamos una combinación imbatible hoy".
Büchli, cada vez más sólido como fondista. Foto: Gert Bonestroo/NK Baanwielrennen |
Y luego volvía a exhibirse, con Heijnen como compañero en
una madison que fue un mano a mano contra Casper van Uden y Yanne Dorenbos,
aunque siempre mantuvieron la cabeza, para imponerse 46 a 43, con los
prometedores Justus Willemsen-Elmar Abma en el tercer cajón del podio. “Estoy
contento con el resultado, pero la forma en que tuve que correr la final no es
como lo hago normalmente. Me gusta atacar, pero en esta ocasión tuve que
preocuparme más por los ataques de los rivales. El balance del Campeonato es
muy bueno, porque en el scratch y la eliminación Büchli fue demasiado
fuerte".
Y finalizando con los 500 metros y el kilómetro, la
prueba femenina coronó a Kalee (36.000) que superaba en 8 décimas a Lonneke
Geraerts (plata) y en casi cuatro segundos y medio a Nienke Dullemond (bronce).
La masculina le supuso a Van Loon subir a lo más alto del podio, tras las
platas en velocidad y keirin tras Harrie Lavreysen. El piloto de BEAT, con 1.03.471
superaba por apenas 49 milésimas a Lars Romijn, con Daan Kool como tercer
clasificado. “Contra Harrie, la plata era en realidad lo más alto que podía
alcanzar. Aquí estaba mi oportunidad de lograr el tricolor y estoy muy feliz
de haber logrado llevarme esta camiseta a casa".
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