En los días previos al Campeonato de España de Galapagar, en
los comentarios a una de las previas del evento, surgió un debate al hilo
del declive -esperemos que no sea irreversible- de la velocidad que hay en
España por la falta de un proyecto federativo, aunque alguno quiso
aprovechar para ‘castigar’ al entrenador de varios antiguos velocistas que, por
diferentes motivos, pero siempre por esas nulas posibilidades de hacer
carrera en esa disciplina abandonada, se han pasado al fondo.
El madrileño Rubén Sánchez,
en su primera temporada como juvenil, es el último corredor que quiere
aprovechar su potencia y su rapidez en el fondo, a
pesar de sus condiciones para la velocidad. Sin entrar en ningún tipo de
polémica, lo primero que nos dice es que “siempre he hecho pruebas de fondo,
tanto en pista como en carretera, y con buenos resultados en ambas. De hecho, el
año pasado fui campeón de España en carretera. Es cierto que por mis
condiciones y por mi corpulencia, se me da bien el sprint, y por eso he
ganado muchas competiciones en pista.
Pero ahora tengo que hacer entrenamientos distintos. Por ejemplo, la
próxima prueba de la Copa de España que tenemos -precisamente hoy- son casi 140
kilómetros, y tienes que ganar en fondo. Y es lógico que, para aguantar en
carretera, tenga que perder algo de velocidad en pista”.
Igualmente hay que recordar que, en sus años de cadete,
fue plata en madison y ómnium en 2021 y volvió a subir al podio en ambas
disciplinas, como medallista de bronce. Este año, ya como junior, ha podido
volver a subir al podio: a por la plata en Mallorca en esas dos pruebas, y
en Galapagar, por el oro en scratch y persecución por equipos o la plata en
eliminación. De su antiguo poderío como velocista le queda una tercera
plaza en keirin y una cuarta en velocidad, amén de la victoria en una velocidad
por equipos que ya ha dejado de ser una prueba para sprinters… por la ausencia
de estos.
“El balance de Galapagar ha sido bueno para mí. He estado
delante en las pruebas de fondo, y en velocidad lo he notado, porque hay gente
que entrena como velocista y tiene esa chispa que yo ya no tengo. Por
ejemplo, Hugo (Sánchez) está entrenando fuerte, haciendo lo que le gusta y en
este Campeonato lo ha dado todo”, nos indica el alcalaíno. Eso sí, cada vez que
hablamos nos dice que “la única prueba que tengo atravesada es la tempo.
Este año, en Mallorca, si hubiera puntuado, creo que podría haber sido campeón,
aunque los valencianos estaban muy fuertes”.
Sobre su periplo en carretera, se siente satisfecho. “He
estado en Don Benito y en Valencia y se me ha dado bien. Sé que ahora mismo
tengo dificultades con la montaña, porque me pesa más el culo, pero es algo que
no me asusta. Me va a tocar sufrir más que a otros, pero es lo que me ha
tocado. A cambio, tengo otras ventajas y puedo destacar en otro tipo de
pruebas más llanas”. Eso sí, objetivos concretos, aún no se plantea, aunque tiene claro que “en
carretera, como en pista, ganar todo lo posible”.
Tras su papel en los Nacionales de pista, es lógico pensar
en él como un futurible de la selección,
“pero todavía no me han dicho nada. Me gustaría poder estar en el Europeo de
pista -en julio en Anadia- pero tener también una oportunidad en el de
carretera si el recorrido es adecuado para mí”.
Y sobre un hipotético regreso a la velocidad si no le salen
las cosas en carretera, “es algo que podría plantearme, pero en el futuro. De
momento, estoy aquí, intentando ser ciclista de carretera”.
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