Matsūra, hoy 875.000 euros; pero más de 6,5 millones en su carrera. Foto: Facebook keirin.jp |
Un
año más carrera respondió a la expectación creada, con unas primeras vueltas de colocación, con Shintarō Sato muy atento en las primeras posiciones, y con Yūta Wakimoto y Yusaku Koshō cerrando el grupo
hasta el momento en que abandonó el piloto guía -la derny, que diríamos en el keirin
internacional- y la línea formada por los dos últimos campeones evolucionó
hasta la cabeza, que tomaron cuando se entraba en la última vuelta.
Incluso en la
contrameta cogieron unos metros de avance que hacían presumir que el triunfo
estaría entre ellos. Pero allí llegó el contraataque de otra línea, con Fukaya
y Matsūra,
que
cerrarían el hueco sin mayor problema entrando en la recta de llegada para adelantar
a Wakimoto y Koshō, y lanzar el sprint, que se llevaría Matsūra de forma ajustada sobre
Fukaya, con Masugi llegando desde atrás en tercer lugar adelantando a Koshō, que debía conformarse con la cuarta plaza.
Así terminaba la prueba. Foto: Facebook keirin.jp |
Nacido el 21 de noviembre de 1990, de Hiroshima, este año
afrontaba su quinta participación consecutiva en el Grand Prix, para el que
se clasificó en base al ranking de ganancias, aunque este año consiguió el
triunfo en dos pruebas GII, la Winners Cup, en marzo, y el Summer Night
Festival, en julio, que conseguía por tercer año consecutivo. Séptimo,
octavo y dos quintos habían sido sus resultados en los años anteriores antes de
que le llegase hoy la victoria.
Para hacernos una idea de la importancia económica del keirin,
con la victoria de hoy termina el año con 252,7 millones de yenes de
ganancias (1,6 millones de euros), aunque no bate el récord de Wakimoto en
2022, de 2,17 millones. Con ello, en su carrera ya supera los mil millones de yenes, concretamente
1.015,68 (6,5 millones de euros). Es el piloto número 39 en alcanzar esa
cantidad, de los que 21 están en activo.
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