Con todo lo que el organizador debería haber ofrecido antes y durante su evento, cualquier periodista que le preste una mínima atención está en condiciones de cumplir su cometido informativo. Desgraciadamente hay muchos informadores que no pueden -o no quieren- prestar la más mínima atención. Y es ahí donde el organizador debe hacer un último esfuerzo, con una crónica del evento.
Los organizadores de pruebas de Seis Días, como Rotterdam, suelen ofrecer una información bastante completa |
Si se han cumplido los pasos anteriores de proporcionar información durante
el evento a través de las redes sociales, elaborar una crónica aceptable desde
el punto de vista informativo es algo rápido y sencillo, como lo es también
adjuntar los otros elementos necesarios, fotografías y clasificaciones, sobre
todo, sin olvidarnos de las declaraciones en vídeo que pueden ser también validas
como audios, no lo olvidemos. Unos contenidos que, recordemos, son tanválidos con el sistema ‘push’ como con el ‘pull’, es decir, si se remiten por
mail, por ejemplo, como si se cuelgan en la web o página de Facebook, sin
olvidar que se puede ‘avisar’ o ‘recordar’ mediante otras redes sociales, especialmente
X.
Sobre las crónicas, unos detalles que muchas veces se olvidan:
- Cada día, mejor. Hay algunos organizadores de pruebas de varios días que prefieren enviar una crónica final, que una diaria. Si se trata de un evento menor, es perfectamente válido y comprensible. Pero si es, por ejemplo, un Campeonato en el que se ponen en juego varios títulos cada día, es casi imprescindible la crónica diaria, independientemente de que el último día se pueda hacer un balance o un resumen.
- Cuanto más elaborada, mejor. Los periodistas tenemos cada día menos tiempo y más contenidos e independientemente de actitudes poco profesionales de ‘copiapeguismo’ sin revisar, cuando más fiable y profesional sea un contenido, más posibilidades tiene de ser publicado.
- Cuando
antes, mejor. El organizador debe ser el primero en enviar el contenido de su prueba,
incluso que las agencias informativas. Porque si no lo hace, los medios
recurrirán a otras fuentes más rápidas y todo el trabajo realizado valdrá para
poco. Esto es válido incluso si el evento termina demasiado tarde y el envío
se hace por la noche: siempre habrá alguien que lo pueda usar y si no es así, seguirá
siendo perfectamente válido a la mañana siguiente.
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