Cuando la zona azul es practicable en un velódromo como en Roubaix

En los días anteriores habíamos comentado el hecho, sobradamente conocido, de que la París-Roubaix acaba en un velódromo. Sin embargos, a los efectos de la llegada es como si fuera una carretera más, y no se aplica la reglamentación de pista en ningún caso.

La imagen de Eurosport muestra a Philipsen por la zona azul

Todos sabemos que las normas sobre la ocupación del pasillo de sprinters son el ABC de esta disciplina y que, por debajo, la zona azul es impracticable. Por ello, desde la óptica de la pista, nos sorprende el desenlace del sprint por la segunda plaza de la carrera de ayer. Nils Pollit, el menos rápido de los tres protagonistas, pero buen conocedor de cómo se corre en un velódromo, cogía la cuerda con el fin de obligar a sus compañeros de escapada a tener que rodar por arriba, es decir, a tener que hacer muchos más metros para remontarle.

Sin embargo, Philipsen no se dio por enterado y se metía por la zona azul, desde donde lanzaba el sprint, adelantando a Pollit, e incluso sacándole del pasillo de sprinters. El alemán se quedaba sin el podio, ya que por el exterior también le superaba Mads Pedersen. Pero no hubo ni quejas, ni mucho menos reclamaciones: no era una carrera de pista.

Captura de L'Equipe en France3 con Van Dijke por el interior

Según me aclaran, el belga le hizo un interior con todas las de la ley y me hacen la comparación de que es como si le hubiera adelantado en una curva normal. Lo que sucede es que en los finales ‘convencionales’ no suele haber curvas y si las hay, están perfectamente delimitadas por las vallas.

Y entonces, ¿cuál es el límite en este caso? Pues que se lo pregunten a Tim Van Dijke que fue relegado por lanzar el sprint por debajo de la zona azul que debe ser lo que se considera todavía ‘carretera’… y por donde debería haber rodado el de UAE para mantener sus opciones. Pero esa duda quedará para siempre, aunque posiblemente a Pollit no se le olvidará hasta donde debe ‘bajar’ en una situación así, si alguna vez vuelve a presentársele.