Gran Bretaña recupera su posición en lo más alto del medallero de un Europeo junior y sub23 que ha dejado a Cottbus con ganas de repetir

Con un balance de 26 medallas -12 oros, 8 platas y 6 bronces- Gran Bretaña ha sido la gran dominadora en el medallero
de los Campeonatos de Europa junior y sub23 que se han celebrado en Cottbus (Alemania), entre el 9 y el 14 de julio. De esta forma, sucede a Italia, como vencedora en los dos años anteriores, aunque la selección ‘azzurra’ terminaba en tercer lugar, con 20 -7, 7 y 6-, con Alemania en el segundo, con 22 -7, 12 y 3-.

Un medallero en el que resultaba muy grato ver a España en sexto lugar, con tres títulos, un subcampeonato y dos podios más, un resultado que llevaba muchos años sin producirse, aunque no debe llevarnos a engaños; es muy positivo y satisfactorio para los corredores, pero sigue denotando un trabajo equivocado en la dirección federativa. En breve profundizaremos sobre este asunto.

La gran estrella de Gran Bretaña fue su velocista Viorica Georgette Rand con pleno en las pruebas individuales, para desesperación de la alemana -e ídolo local- Anastasia Kuniß, que cosechó sendos subcampeonatos, aunque le queda el honor del oro en la velocidad por equipos, donde estuvo acompañada de Amy Weber y de Emilia Waterstradt.

Rand, con uno de sus tres oros

Por el contrario, entre las sub23, las británicas fueron las mejores en la prueba por equipos, pero en las individuales no pudieron hacer frente ni a Taky-Marie Divine Kouamé, ganadora de la velocidad y los 500 metros, ni a Clara Schneider, campeona del keirin y subcampeona en las otras tres pruebas ‘cortas’.  


Entre los juniors, el francés Etienne Oliviero se iba con dos oros, en velocidad por equipos -donde rompían el dominio alemán de años precedentes- y kilómetro, mientras que de los sub23 Mattia Predomo terminaba con el triunfo en la prueba colectiva y el keirin, aunque cayó bastante pronto ante el ganador de la velocidad, el alemán Luca Spiegel que demostró estar muy fuerte de cara a los Juegos.


Pasando a las persecuciones, Italia volvió a ser la más destacada, ganando las dos pruebas por equipos masculinas, pero sin poder ni con las sub23 británicas ni las juniors alemanas, aunque en ambas pruebas estuvo en el podio. Eso sí, a nivel individual solamente se coronó Federica Vanturellitambién  ganadora por equipos y bronce en el ómnium, quedándose en casa las dos categorías juveniles, destacando a una Joelle Amelie Messenger que se llevó el oro igualmente en la colectiva.


Vandenbranden, de la persecución al omnium
En sub23 el triunfo fue para el gran favorito, el belga Noah Vandenbrandenotro de los grandes protagonistas en Cottbus, ya que también ganó el ómnium, se llevó la plata con la cuarteta de su país y el bronce con su compañero de madison. 

En cuanto a las pruebas de fondo, la junior Isobel Carys Lloyd ganaba tanto el ómnium como la madison, en compañía de Cat Ferguson, siendo el masculino para otro británico William Slater. En esta prueba y categoría Davide Stella sumaba su segundo oro -tras el logrado en la cuarteta- y tercera medalla, junto a Eros Sporzon.


Destacar igualmente a la polaca Olga Wankiewickz, muy sólida en el ómnium, a las belgas Katrijn De Clercq-Hélène Hesters, que demostraron que no desmerecerán en París si finalmente son las elegidas, y por supuesto a Austria, campeona de la madison élite por segundo año consecutivo, una prueba de que el trabajo de equipo es más importante siempre que la suma de las individualidades. 

Los aficionados españoles se dejaron sentir
Satisfacción con las ceremonias protocolarias

Pasando al aspecto organizativo, el director general del Campeonato, Axel Viertler, declaraba que “en general estamos muy satisfechos con el evento y creo que lo organizamos bien", destacando el lleno en las gradas con más de 4.000 visitantes y la presencia de bastantes aficionados extranjeros. "Fue un público muy amplio, que no sólo estaba formado por residentes de Cottbus. También italianos, españoles, franceses, checos y polacos, entre otros, apoyaron firmemente a sus compatriotas", lo cual siempre supone un retorno de la inversión para la ciudad alemana.

Anastasia Kuniß, una de las ídolos locales

Incluso en algunos medios he podido leer que no descartan volver a organizar el evento, señalando la fecha de 2026, una edición esta ya otorgada para Tel Aviv, incluso ya con fechas a finales de julio y principios de agosto, aunque la situación actual en Israel no es ahora mismo la más propicia para un evento de este tipo. Si no fuese en ese año, la primera libre es la de 2028, ya que el próximo verano será nuevamente en Anadia (Portugal) y en 2027 en Heusden-Zolder (Bélgica).

Por otro lado, los organizadores valoraron muy positivamente la celebración de las ceremonias protocolarias en un espacio exterior a la pista, algo en lo que discrepo. “Fueron muy bien recibidas. Especialmente en el rango de edad en el que vienen muchos padres, que pueden estar cerca. Creo que esto marcó nuevos estándares en comparación con los Europeos anteriores", indicó Viertler, a lo que Detlef Uibel, director deportivo, añadía que “simplifica el programa de competición". Y no puedo estar de acuerdo porque para la gente que seguía el evento por streaming, se trataba de un espacio muerto, a veces cercano a la media hora, que es de difícil justificación, incomprensiblemente sin ofrecer las imágenes de las ceremonias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario