El Lee Valley instalará una barrera de metacrilato en la balaustrada, de 1,4 metros de altura, como protección para el público y los ciclistas

El grave accidente surgido en los Juegos de la Commonwealth de 2022, cuando Mathew Walls y Matt Bostock salieron por encima de la balaustrada en una prueba golpeando a varios espectadores, va a tener consecuencias dos años después.

Y es que los gestores del Lee Valley VeloPark, el escenario donde se produjo el incidente, han anunciado la instalación de una barrera de metacrilato, de 1,4 metros de altura alrededor de toda la pista. Dicha instalación tendrá un coste de 250.000 libras, dentro de un proyecto global de mejoras cifrado en 750.000 libras y que se iniciará a finales de mes con el fin de esta lista para las próximas pruebas, entre las que se destacan la nueva London 3 Day, a finales de septiembre, y las dos pruebas finales de la UCI Track Champions League, a comienzos de diciembre.

Igualmente manifiestan que es la primera barrera de este tipo en Gran Bretaña y la tercera de este tipo existente en el mundo, y que ha sido realizada tras consultar con la UCI sobre su diseño, que no afectará a la visibilidad de los espectadores en los niveles inferiores, garantizando la seguridad de los corredores, aunque este tipo de accidentes, afortunadamente, son muy poco numerosos.

Hay que destacar que tras el accidente voces tan cualificadas como las de Chris Hoy o de Laura Kenny pidieron medidas de protección ya que consideran que al ser cada vez más altas las velocidades, los riesgos son cada vez mayores. Y que para la UCI garantizar la seguridad es una prioridad, por lo que no será descartable que esta medida se implementase próximamente en más recintos.