Mañana lunes comenzarán las obras de renovación de la cubierta del Velódromo Antonio Elorza de Anoeta, según publicaba ayer Diario Vasco. Unos trabajos destinados a resolver el problema de las goteras y filtraciones que afectan a la instalación desde hace varios años y que obligaron a colocar unas lonas interiores en determinados momentos para poder seguir utilizando la pista.
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| Las lonas, una solución provisional pero efectiva. Foto: Martin Early |
Lo más importante es que la actividad diaria en el velódromo no se verá afectada, ya que se realizará en todo momento por el exterior. Tal y como ya adelantamos, los trabajos prevén la retirada de las dos capas de láminas de PVC que componen actualmente la cubierta y su sustitución por láminas de FPO, un material de última generación -y garantizado 25 años por el fabricante- que permite, además, la colocación de placas fotovoltaicas en un futuro. Igualmente se aprovecharán las obras para colocar un aislante térmico que mejore la eficiencia energética de la instalación.
El proyecto
cuenta con un presupuesto de 1,4 millones de euros, de los cuales 530.000€ provienen
del Plan de subvenciones para equipamientos deportivos de la Diputación Foral
de Gipuzkoa y los 870.000€ restantes corresponden a la aportación municipal. En
principio, las obras se prolongarán hasta el mes de diciembre, con el
objeto de poder empezar en enero la rehabilitación del Miniestadio.
Hay que recordar que el velódromo se inauguró el 21 de agosto de 1965 para albergar los Mundiales de ese mismo año, pero que no fue hasta 1973 cuando se cubrió, precisamente para la celebración del segundo y último Mundial en pista donostiarra.
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